¿Cómo reconocer una tarotista que es un fraude?
Cada vez son más las personas las que se deciden a contratar los servicios de una tarotista ya que es una estupenda manera para poder establecer una ventana que nos va a informar sobre ciertos datos que acontecieron en nuestro futuro. Como existe una necesidad incipiente, son muchas las tarotistas las que nos ofrecen este tipo de servicio… Desgraciadamente, no todas son de fiar.
Algunas falsas tarotistas lo que hacen es ofrecer unos falsos servicios de videncia que únicamente se pueden cumplir por casualidad, pero que en ningún momento representan una visión fiel sobre nuestro futuro.
Si quieres contratar un servicio de videncia real y no quieres que te estafen, deberías seguir nuestros siguientes consejos.
Sensaciones: A pesar de que no tengamos poderes, sí que es posible sentir diferentes sensaciones en base a lo que nos transmite una tarotista falsa. Si tenemos cualquier atisbo de duda, lo mejor que podemos hacer es abandonar la consulta porque seguramente nos estén engañando. Además, las dudas lo único que harán es que no estemos concentrados, por lo que la interpretación no será aceptada.
Coste: Otro de los criterios en los que nos tenemos que basar para saber si la “tarotista” es falsa o no, es en lo que nos quieran cobrar. Normalmente, suelen pedirnos una suma elevada de dinero para realizar diferentes servicios. Debes de saber que estos dones son concedidos a las profesionales para que saquen el mínimo beneficio de ellos (se establece que tienen que sacar beneficio adecuado como para poder vivir, pero no para hacerse ricas con ellos).
Si consideras que la cuantía que te van a cobrar es demasiado elevada, deberías de escapar de allí cuanto antes porque con toda probabilidad te están estafando.
Siempre busca a una vidente de calidad con una larga trayectoria en el mercado y, a poder ser, que te la haya recomendado algún amigo.
¿Tarotista buena, tarotista mala? ¿Cómo librarse de las estafas?
No te vamos a engañar: existen muchos casos en donde las tarotistas y las videntes se han lucrado de la buena fe de la persona consultante; en otras palabras, ni eran videntes, ni tenían ningún tipo de poder, lo único que quería es sacar la máxima cantidad de dinero al usuario.
Esto no quiere decir que todas las videntes sean una estafa ni mucho menos, sólo que hay que saber buscar y comparar para evitarlas.
Elige siempre tarotistas / videntes naturales
Una vidente natural o tarotista real es aquella que obtuvo sus poderes desde el nacimiento. Para que lo puedas comprender, imagina la situación de los niños que han sido separados al nacer. Uno de ellos, aprende un idioma, mientras que el otro aprende dos al mismo tiempo.
Cuando llegan a los siete años, estos dos niños se encuentran: aquel que sólo dominaba un idioma quiere aprender el otro que ya domina el otro niño. Sin embargo, cuando empiece a aprenderlo, se dará cuenta de que no lo tiene tan fácil. Sin embargo, el niño que dominan los dos idiomas hemos aprendido de una forma natural, sin esforzarse. Y lo mejor de todo es que esto les ayudará a adquirir un nivel de dominio del idioma “nativo”.
En otras palabras, que si elegimos una tarotista buena o vidente natural, habrá adquirido sus poderes desde el nacimiento, lo que le todo tiempo para poder dominarlos a la perfección y adaptarse a las necesidades que el usuario puede llegar a tener.
Pero detectar a una vidente natural no es tan sencillo como nos podamos llegar a pensar: tendremos que utilizar toda nuestra intuición y analizar hasta el más mínimo detalle. Si hay algo que no nos termina de convencer, lo mejor que podemos hacer es elegir a otra vidente.
